- Infame el fallo emitido en el caso de "la Manada". La diferencia entre la agresión sexual (violación) y el abuso sexual es que en la primera hay violencia o intimidación. Si somos rigurosas con la letra de ley, puedo aceptar que no haya habido violencia, ¿pero intimidación? Precisamente este caso es el paradigma de la intimidación. Cinco hombres rodeándote en un portal, en milésimas de segundos entiendes que te van a violar. O te sometes o te matan.
Que nos expliquen los señores magistrados cuál es el grado de violencia que debemos soportar, o cuál es la naturaleza e intensidad de la resistencia que debemos oponer para que después de que cinco energúmenos te penetren a antojo, se considere violación y que se les imponga una pena en consecuencia.
El mensaje es claro: si no te matan no es violación; si intentas rehacer tu vida (recordemos que se juzgó la conducta de la víctima durante el proceso judicial), no hay violación.
Basta ya de una justicia patriarcal que no nos ampara a las mujeres ni en los casos más sangrantes. Basta ya de una sociedad machista que justifica a los agresores. Basta ya de la creencia de que los cuerpos de las mujeres y nuestras vidas son de libre disposición para los hombres; porque detrás de todo esto subyace esa idea. Siglo XXI y seguimos sin pertenecemos a nosotras mismas. Le pedimos a la Justicia que nos reconozca al menos eso y otra vez, nos da la espalda. No es que nos otorguen más o menos derechos, es que tan siquiera nos han "concedido" lo más básico: vivir sin miedo. Compañeras, a la calle.
- Obtener enlace
- Correo electrónico
- Otras aplicaciones
Etiquetas:
#NoEsAbusoEsViolación
feminismo
Lidia Falcón
perspectiva feminista
sentencia
violencia sexual
yo te creo
- Obtener enlace
- Correo electrónico
- Otras aplicaciones
Comentarios
Publicar un comentario