Comparto la recopilación hecha por Yolanda Rodríguez de Médicos del Mundo, de las propuestas abolicionistas del modelo nórdico. Son las siguientes:
- Descriminalización de las mujeres prostituidas. La ley impide expresamente que pueda ser objeto de ningún tipo de sanción por ejercer la prostitución.
- Ayudas integrales para las mujeres que quieran dejar la prostitución.
- Renta mínima de inserción. Asesoramiento legal y laboral. Formación.
- Ayuda profesional para tratar las secuelas médicas y psicológicas que la prostitución inflige a la salud de las mujeres.
- Criminalización total del proxenetismo y del lucro con la prostitución ajena en todas sus formas. - Prohibición de los burdeles y de la prostitución organizada.
- Formación específica sobre prostitución desde una perspectiva de género y abolicionista a profesionales implicados; desde abogadas/os, policías, jueces y fiscales hasta terapeutas o funcionarias/os que tengan que interactuar con las mujeres que estén dentro o que salgan de la prostitución.
- Programas de sensibilización en medios de comunicación y educación en centros escolares y de formación sobre la realidad de la prostitución y las consecuencias en toda la sociedad para prevenir la existencia de futuros consumidores de prostitución.
- Criminalización de los puteros. La compra de sexo se multa de forma generalizada y se encarcela a los reincidentes y a los que soliciten sexo con menores. Esta se ha convertido en la medida más efectiva para reducir la demanda de prostitución, pues un porcentaje alto de los hombres que pagan por sexo dejan de hacerlo si saben que van a figurar en un registro oficial y recibir notificaciones de multa por esta causa en su domicilio.
- Descriminalización de las mujeres prostituidas. La ley impide expresamente que pueda ser objeto de ningún tipo de sanción por ejercer la prostitución.
- Ayudas integrales para las mujeres que quieran dejar la prostitución.
- Renta mínima de inserción. Asesoramiento legal y laboral. Formación.
- Ayuda profesional para tratar las secuelas médicas y psicológicas que la prostitución inflige a la salud de las mujeres.
- Criminalización total del proxenetismo y del lucro con la prostitución ajena en todas sus formas. - Prohibición de los burdeles y de la prostitución organizada.
- Formación específica sobre prostitución desde una perspectiva de género y abolicionista a profesionales implicados; desde abogadas/os, policías, jueces y fiscales hasta terapeutas o funcionarias/os que tengan que interactuar con las mujeres que estén dentro o que salgan de la prostitución.
- Programas de sensibilización en medios de comunicación y educación en centros escolares y de formación sobre la realidad de la prostitución y las consecuencias en toda la sociedad para prevenir la existencia de futuros consumidores de prostitución.
- Criminalización de los puteros. La compra de sexo se multa de forma generalizada y se encarcela a los reincidentes y a los que soliciten sexo con menores. Esta se ha convertido en la medida más efectiva para reducir la demanda de prostitución, pues un porcentaje alto de los hombres que pagan por sexo dejan de hacerlo si saben que van a figurar en un registro oficial y recibir notificaciones de multa por esta causa en su domicilio.
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